El concursante

Martín Circo Martín (Leonardo Sbaraglia), joven profesor asociado de Historia de la Economía, acaba de convertirse en el ganador del mayor premio jamás concedido en la historia de la televisión: más de 3 millones de euros en premios de todo tipo. Sin embargo, pronto descubre que ser millonario es caro, y no tiene el dinero para permitirse los premios. Hacienda, por su parte, reclama la mitad de las ganancias. Casi sin darse cuenta, Martín se ve en una trampa sin salida, intentando vender todos los premios que ganó. Edmundo Figueroa (Chete Lera), un viejo extravagante y disidente, puede ser su última oportunidad de escapar. El concurso acaba de empezar... Fragmento de la pelicula El Concursante

Sacco y Vanzetti



Documental de Peter Miller que desarrolla la historia de los dos anarquistas italianos que fueron ejecutados en 1927 en Estados Unidos. Desde este hito histórico, se presenta el actual problema de las libertades civiles y de los derechos de los inmigrantes.



El 23 de agosto de 1927, los inmigrantes italianos Nicola Sacco y Bartolomeo Vanzetti fueron ejecutados en la silla eléctrica en Massachusetts, Estados Unidos. Habían sido condenados por un robo a mano armada que nadie creyó que hubiesen cometido, pero el verdadero motivo fue su ideología anarquista.

El filme de Montaldo es sobre todo una adaptación simplificada del argumento minuciosamente documentado de Herbert Ehrmann, según el cual el robo y asesinato de un pagador en South Braintree, Massachussets, de los que se culpó a los anarquistas italianos, fueron en realidad obra de una organización criminal conocida como la banda de Morelli. La trama nos lleva a escenas de la lucha de clases en Boston, con un conflicto de lucha social “dura” contra el cual Frederick Katzmann, un fiscal al servicio de los poderes establecidos, educado en Harvard, capaz de firmar la condena a dos inmigrantes italianos “subversivos” que ya son personajes de la historia universal.

La historia de Sacco y Vanzetti tal como es presentada en la película, no fue solamente un caso de mero error judicial, sino todo un ejemplo de la instrumentalización del sistema de justicia en defensa de los intereses políticos de la mayoría conservadora que entendió la condena como un escarmiento. Los dos anarquistas fueron ejecutados por ser tales y, por tanto, representantes de un “peligro social”; por ser inmigrantes y pobres; y por ser italianos, extranjeros, como advertencia para otros. La película está concentrada en el juicio, queda patente la falta de pruebas y la resolución injusta, sugiriéndose incluso un acuerdo entre el juez y el fiscal, algo que estuvo en cabeza de los que se opusieron.